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La felicidad es algo escurridizo que se nos escapa de las manos, que queremos retener para siempre pero no logramos hacerlo, porque es como el agua y acaba desapareciendo
Ser feliz es un trabajo de 24 horas y 365/366 días al año porque no es un don o algo que se pueda comprar como un kilo de naranjas.
La felicidad es como una quimera, como un suspiro, es un fenómeno que cambia más que el viento y la temperatura, como un desvarío.
La felicidad no es un hecho tangible, no es algo que se pueda coger y atesorar, pues depende de nuestra mente, de nuestro tipo de vida, depende de muchos factores.
La Felicidad es algo efímero, pero puede revivir como el ave Fénix...
Lo que tengo claro es que ser feliz es algo pasajero, no creo que nadie sea feliz todo un santo día, no creo que nadie sea feliz constantemente.
Encontrar y retener algo de felicidad es un arduo trabajo, es un camino que hay que seguir todos los días de todos los años de nuestras vidas.
La felicidad a veces es un estado de salud mental, un ánimo, simplemente un momento de paz y de tranquilidad entre otros momentos de estrés y nervios.
Ser feliz no es algo comparable con estar en forma y no tener peso de más o estar flexible aunque pueda ser bueno para ser feliz estar en o tener esas circunstancias.
Tener alegría o alegrías es un buen comienzo y camino para ser feliz, pero de dónde sacamos las alegrías? cómo acabamos con las penas y la incertidumbre de la vida?
Para tener alegría o alegrías creo que lo principal es tener ilusión o ilusiones por cuestiones variopintas.
Sonreir, reir a carcajadas o suavemente, encontrar la ilusión en lo sencillo, en lo natural es lo más fuerte que se puede hacer para ser Feliz.,
Poder pensar en alguna actividad, en algo que puedas hacer o no hacer y te ilumine la cara y el alma,
Ilusiones por cosas sencillas, no se trata de buscarlas, sino de encontrarlas.
Encontrar ilusiones simples y naturales, no basadas en las propiedades ni en las compras de cosas ni artilugios, ni en la búsqueda de placeres comprados con dinero.
Las ilusiones deben de ser lo más naturales y sencillas posibles, como ver una pinada, unas plantas, ver pasar animales corriendo o volando o ver un atardecer en el mar.
Nada que ver con el dinero, nada que ver con el egoismo vacuo de la propiedad.
Hacer el bien a los demás, también es una forma de encontrar ilusiones entre las tristezas.
La Felicidad es tan simple a veces como sonreir a un extraño, como ayudar a un desconocido, como leer un buen libro o como escribir una sencilla poesía.
Encontrar la ilusión en cualquier momento y lugar, en los ámbitos más diversos, incluso cumpliendo con nuestro deber en el trabajo, debe de ser una de las mejores formas.
Escuchar una buena historia, contar un buen relato puede ser un camino bien bueno para conseguir alegría.
La ilusión necesita de la alegría y/o viceversa para alimentarse y de ellas parece ser que se nutre la pasajera... Felicidad...
La felicidad es un respiro, pero tener ilusión y encontrar alegría en lo sencillo es la forma más adecuada y plausible de ese encuentro.
Pues a ello.
Amén.