Los tiempos difíciles han existido durante toda la historia de la humanidad. Ya que,  no es nada nuevo escuchar sobre enfermedades, problemas económicos, guerras, contaminación, cambios climáticos, entre otras.

De hecho, quienes han sobrevivido a todas estas situaciones son aquellas personas que han sabido aplicar la resiliencia. Te estarás preguntando qué significa esta palabra, de hecho es la capacidad que tienen los seres humanos para adaptarse a circunstancias traumáticas y difíciles.

Asimismo, la persona debe poner en práctica toda su inteligencia emocional para  sobreponerse a todo lo que ha tenido que vivir. Además, usar esas experiencias adversas para aprender de ellas y crecer.

Por lo general, los seres humanos cuando enfrentan escenarios como la muerte de un ser querido, problemas económicos, separación de su pareja, entre otras. Siente un vacío muy grande, consideran que han fracasado y comienzan un proceso donde experimentan depresión. Lo cual es muy peligroso, porque sucumbirán al no ser capaces de seguir luchando.

Ahora bien, tener la capacidad para adaptarse no se logra de la noche a la mañana. Tampoco se nace resiliente, es necesario pasar por un proceso donde se lidia con situaciones difíciles que nos ponen al borde de un precipicio. No obstante, si en vez de resignarnos, nos resistimos a perder, a fracasar y damos el paso para enfrentar las contrariedades, es posible salir adelante.

Piensa por un momento que eres un ser humano, con inteligencia y habilidades que te colocan en la cima de la cadena alimenticia. Así que, vales más que un pulpo, un animal marino que lleva la delantera en cuanto a resiliencia se refiere. Pues, es capaz de cambiar de color para camuflarse, nada, corre, crea guaridas para protegerse, saben cambiar de camino y aprenden de los pulpos mayores.

Entonces ¿quieres ser resiliente?, comienza de esta manera:

• Reflexiona sobre tus fortalezas y debilidades.
• Explota tu creatividad.
• Confía en tus habilidades.
• Observa las adversidades como oportunidades para el aprendizaje.
• Relájate mental y corporalmente.
• Se objetivo pero también optimista.
• Controla tus emociones.
• Aléjate de la gente tóxica.
• Aplica la metodología del bambú fuerte y flexible ante los cambios.
• Enfrenta la vida con constancia y buen humor.

Prof.a Gael Contreras de P.

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