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El gobierno de Argentina entregó este jueves bonos por más de 5.000 millones de dólares al grupo español Repsol para indemnizarla por la controvertida nacionalización de la petrolera YPF en 2012, y de esta forma sellar el diferendo.
Argentina "ha entregado la cantidad de Títulos Públicos Iniciales establecida en el convenio" firmado con Repsol en febrero pasado, indicó el comunicado que detalla los títulos públicos que suman casi 5.400 millones de dólares como compensación a la expropiación.
Según el Ministerio de Economía y Finanzas, Repsol entregó a Argentina, "de acuerdo al Convenio, los escritos de desistimiento de las acciones judiciales, administrativas y arbitrales iniciadas por dicha sociedad, sus afiliados y ciertos terceros, en relación con la expropiación y cuestiones conexas".
La petrolera española había denunciado al país sudamericano ante la justicia de Nueva York, Madrid, Buenos Aires y en los tribunales del CIADI, el órgano de arbitraje del Banco Mundial.
Para la cancelación, Argentina emitió bonos por 3.250 millones de dólares con vencimiento en 2024, papeles por 1.250 millones que vencen en 2033, por 500 millones con vencimiento en 2017 y por poco más de 317 millones de dólares con caducidad en 2015.
Con este anuncio Repsol sella su salida de Argentina y recibe los bonos como medio de pago por la expropiación del 51% de las acciones de YPF e YPF Gas, compañía privatizada en los años 90.
La indemnización es percibida por algunos analistas opositores al gobierno de Cristina Kirchner como un guiño a los inversores internacionales que criticaron la nacionalización de la petrolera hace dos años, y que ahora son necesarios ante la debilidad de la economía.
La expropiación en abril de 2012 de YPF, la mayor compañía del país, dañó la imagen internacional de la presidenta Cristina Kirchner y desalentó las inversiones de grandes grupos.
Argentina necesita fuertes inversiones para Vaca Muerta, uno de los mayores yacimientos de esquisto butiminoso (shale-oil y shale-gas) del mundo, que mide 30.000 m2 y es la apuesta de Kirchner para lograr el autoabastecimiento de hidrocarburos.
Tras largos meses de conflicto y demandas en los tribunales, Repsol anunció el 25 de febrero la conclusión de un acuerdo con Argentina que le dio "garantías de pago" de una compensación financiera de 5.000 millones de dólares.
El acuerdo preveía un pago en forma de obligaciones de la deuda soberana argentina, que Repsol puede revender sin periodo de carencia.
Teniendo en cuenta que la deuda argentina está incluida en la categoría de especulativa por parte de las tres grandes agencias de calificación financiera, el acuerdo garantiza que, incluso en caso de reestructuración de su deuda, Buenos Aires deberá pagar los 5.000 millones.
Repsol espera recuperar de aquí a dos años el valor nominal de las obligaciones revendiéndolas en el mercado, lo que supondría entre 6.000 y 6.500 millones de dólares.
La petrolera española había anunciado el miércoles la venta al banco estadounidense Morgan Stanley de la casi totalidad de la participación del 11, 86% que aún detentaba en el capital de YPF por 1.256 millones de dólares.
El grupo español dejó en sus manos menos del 0, 5% de los títulos de la petrolera argentina, según un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) de España.
El gobierno de Kirchner decidió la reestatización de la petrolera YPF bajo el argumento de que Repsol enviaba la mayoría de sus ganancias a Madrid y no efectuaba las inversiones necesarias para incrementar la producción de petróleo.
Por su parte, Repsol consideró que la razón de la decisión argentina fue precisamente Vaca Muerta, que promete transformarse en la meca de los hidrocarburos no convencionales.