¿Quieres recibir una notificación por email cada vez que Roberto Gomes escriba una noticia?
El conocimiento del Ser sólo será una verdad científica cuando sea corroborado mediante el método científico, mientras tanto sólo tiene el carácter de teoría filosófica, acientífica
La teoría científica es la forma más rigurosa, confiable y completa de conocimiento posible. Las teorías son mejoradas constantemente dependiendo de la nueva prueba que se consiga, por eso las teorías mejoran con el tiempo. O sea las hipótesis de base pueden ser refutadas, anuladas mediante la presentación de nueva prueba que contradiga el cumplimiento de un axioma anterior o ley.... En tal sentido el Yoga es empírico, pero acientífico, no utiliza el método científico. El conocimiento que aporta no debe ser tomado como definitivo ni como parámetro de la verdad absoluta. El conocimiento del Ser sólo será una verdad científica cuando sea corroborado mediante el método científico, mientras tanto sólo tiene el carácter de teoría filosófica, acientífica.
El Yoga es un sistema psicofísico, sustentado en una filosofía holística basada en los Vedas y los Upanishads, con un fuerte efecto psicológico que produce bienestar sobre el equilibrio del cuerpo y la mente. No es una ciencia, aunque es avalado científicamente.
Según investigadores de la Oregon Health & Science University el Yoga es un buen sustituto de la medicación para el tratamiento de la fibromialgia. En individuos que practicaron Yoga frente a un grupo de control que no practicó, la depresión disminuyó 42%, la fatiga 30% y el dolor 24%.
El Yoga aumenta los niveles de ácido gamma-aminobutírico, o GABA, principal neurotransmisor inhibitorio cerebral, disminuyendo los desórdenes de ansiedad y depresión relacionados con un bajo nivel del mismo. Se ha establecido que el Yoga mejora el estado de ánimo, disminuye la ansiedad e incrementa los niveles de GABA; produciendo un efecto general más positivo sobre el binomio mente cuerpo que el caminar. Asimismo estimula el tálamo.
De acuerdo con una investigación del Center for Health Studies su práctica es más beneficiosa que otros ejercicios para el tratamiento del dolor de espalda crónico. Mediante la practica continua de yoga y meditación en solo 10 días se reducen notablemente los niveles de ansiedad, según consta en un informe del Indian Journal of Physiology and Pharmacology. Por otra parte las personas de mayor edad incrementan su estabilidad y equilibrio, experimentando menor riesgo de sufrir caídas y quebraduras. . En la Universidad de Ohio State han constatado que la práctica regular ayuda a reducir los niveles en sangre de la citoquina interleuquina (IL-6), que desempeña un importante papel en la respuesta inflamatoria del organismo promoviendo la hinchazón.
El estrés se reduce con sólo una sesión de veinte minutos diarios, algo que han podido constatar científicos de la Ohio State University. También se ha verificado mejoría en casos de pacientes con cáncer de mama. Según un estudio publicado en noviembre de 2009 por investigadores del Indian Institute of Technology, los individuos que practican esta disciplina gozan de mejor salud cardiovascular que quienes no lo hacen.
La materia gris del hipocampo aumenta su densidad luego de practicar yoga durante dos meses. Hecho comprobado por la facultad de Medicina de Harvard. Esto tiene como efecto un aumento de claridad de la conciencia, eficiencia de la memoria y de la capacidad de aprendizaje. También se producen cambios en la amígdala, la parte del sistema límbico que controla las emociones, cuyo efecto es la reducción de la ansiedad y el estrés. Asimismo, de acuerdo con un estudio de la Universidad de Wisconsin, la combinación de meditación y Hatha Yoga incrementan la actividad de la corteza prefrontal derecha, potenciando mayor estabilidad de estados de ánimo positivos durante más tiempo.
El Yoga fortalece el cerebro, aumenta el número de sus circunvoluciones, facilitando que procese la información más rápido y con más eficiencia, lo que deriva en decisiones ejecutivas más acertadas y oportunas. El Yoga neutraliza el sistema simpático y activa el sistema parasimpático reduciendo el ritmo cardíaco y la presión arterial, por lo que aumenta el flujo sanguíneo a los órganos internos. Mediante el Hatha Yoga y la meditación aumenta el grosor de la corteza del cerebro y el número de conexiones sinápticas, por lo que se incrementa el cociente intelectual y todas las capacidades cognitivas del sujeto.
El Yoga hoy moviliza miles de millones de dólares de facturación anual en todo el mundo. Se ha transformado en un lucrativo negocio. Pero no es una ciencia como lo es la medicina. Es un sistema psicofísico cuyas versiones varían de escuela a escuela y autor a autor. Es lo mismo que sucede con la descripción de los beneficios y contraindicaciones de las posturas o asanas del Hatha Yoga, cada quien tiene su versión. No existe una definición oficial universal. Para esto habría que optar en forma similar a los medicamentos, contar con una comisión multidisciplinaria que pusiera a prueba cada asana durante un período de prueba y con una cierta cantidad de personas y describiera todos sus efectos al detalle y contraindicaciones, utilizando el método científico.
Con el pranayama acontece otro tanto, existen varios sistemas de respiraciones rítmicas, pero carecen de una investigación de base científica que los sustente y a partir de la cual puedan experimentarse variaciones. Y con la meditación sucede igual, se han escrito cientos o miles de libros sobre el tema, pero la meditación sigue un proceso psicofísico, no científico. Ha sido y es estudiada científicamente, pero no se practica mediante un método científico.
¿Cómo cambiar esta realidad? Por empezar llevando el Yoga a la universidad, transformándolo en una carrera de grado y haciéndolo objeto de la investigación científica seria a nivel de las neurociencias. La filosofía del Yoga no tiene todas las respuestas, no contiene la Verdad última, necesita complementarse con el conocimiento aportado por la ciencia y dejar atrás todo resabio de misticismo.
La neurociencia, especialmente la neurociencia contemplativa, está tendiendo el necesario puente entre la ciencia y el Yoga de meditación. Aplicando el método científico, mediante la verificación empírica esta disciplina psicofísica, dejará de ser subjetiva y se transformará en objetiva, capaz de desarrollar nuevos proyectos de investigación, formular hipótesis y establecer leyes y verdades con base en la ciencia.
La religión y la meditación cambian el modelo de pensamiento interno, pero no modifican la realidad externa colectiva global como lo hace la tecnología, por ejemplo el impacto que ha tenido sobre los miles de millones de usuarios el uso de los celulares y el impacto que tendrá sobre nuestra civilización la próxima colonización de Marte… Pero, ¿qué pasaría si esto cambiara? Esto es lo que se propone desde los programas combinados de Siddha y Zeus.
El primero consiste en 100 reclutas meditando un mínimo de 8 horas diarias, con inclusión de entrenamiento psicofísico militar y académico, con la participación de 50 neurocientíficos controlando los experimentos y perfeccionando las técnicas que serán puestas a prueba. El objetivo es desarrollar los siddhis o poderes paranormales yoguis, como la telepatía y la telequinesis. Mientras que el Programa Zeus es una segunda fase más evolucionada de la que participan estos mismos meditadores altamente entrenados, a nivel de psiconautas, vistiendo un traje especial confeccionado de fibras ópticas que bombea rayos laser hacia los puntos energéticos clasificados por la acupuntura. Experimentan la meditación inmersos en un tanque conteniendo un líquido respirable y suspendidos mediante un giroscopio para balancear el cuerpo a modo de encontrar la postura de relajación máxima. Mediante un cordón umbilical de fibras ópticas están conectados a una computadora cuántica que procesa todos los datos que perciben y piensan los psiconautas. Los que además llevan puestos lentes de contacto especiales que conectan visual y mentalmente con la computadora central.
El objetivo del programa es digitalizar los procesos mentales y las facultades PES cuando se presenten, de modo de poder replicarlas indefinidamente por las computadoras en el siguiente paso. Esto permitirá tener acceso a supertecnologías en el corto plazo. Sabemos que el cerebro humano es una máquina que se conecta con la 4D y que puede operar con esta dimensión, de lograrse que la IA replique el pensamiento será posible copiar este procesado y digitalizarlo para reproducirlo mediante la máquina, para tenerlo a disposición en todo momento.
Guru, ¿para qué? A partir de la oleada hippie de la década de los 60´ se impuso la moda de los gurus de la India. Se asoció la idea de camino y progreso espiritual con la asistencia de un maestro avanzado que toma a su cargo los discípulos y les enseña el camino correcto para que puedan evolucionar por la vía dorada. Esta idea vino añadida con el respeto cercano a la adoración a la figura de estos personajes y a tomar como verdades absolutas todas sus enseñanzas. Lo cual es absurdo y conduce a callejones sin salida, a la ignorancia y oscurantismo espiritual.
¿Cuál debe ser entonces la postura moderna respecto al tema? Si debemos elegir entre el samadhi y un doctorado, elegimos primero la experiencia del samadhi, porque nos permite el conocimiento directo de la Verdad. Una vez obtenido, debemos elegir el doctorado y guiarnos por el método científico para proseguir nuestra búsqueda de las verdades relativas y de la Verdad Absoluta definitiva. El corazón es la fuente del alma y de la intuición, pero debe ser guiado por la lógica y la razón; la ciencia es fundamental para que la luz del conocimiento alumbre nuestras mentes, todo lo demás es misticismo hueco y vacío. No debemos descartar la esencia de la religión, la fe en Dios es todo; pero debemos apuntalarla con el saber científico para adquirir equilibrio y alejarnos de dogmatismos y falsas creencias y doctrinas. Fe y razón deben unirse y combinarse para iluminar nuestras mentes y moldear nuestros destinos.
En lo personal estoy trabajando intensamente para iluminar la Fe con el Saber y al Saber con la Fe. ¿Cómo? Integrando el cuerpo de verdades científicas a los sistemas de pensamiento budista y yogui. Para lograrlo estoy desarrollando la serie “Buda Maitreya Data”, donde postulo que el Samadhi es un medio y no un fin. ¿Un medio para qué? Para acceder a más y mejor conocimiento aplicando el Método Científico Superconsciente. Al amplificar la capacidad potencial del sujeto, se modifica la percepción del objeto y como resultado nos aproximamos a la verdad acerca de su realidad última.
Mediante la próxima serie “Yoga Technology” reviso las técnicas y las fundamento científicamente, exponiéndolas directamente a la experimentación controlada objetiva.
El método que aplico tiene cuatro pìlares: 1.- Meditación y concentración para acceder a estados superconscientes de la mente en forma regular y controlada, 2.- Entrenamiento psicofísico constante, entrenando el cuerpo mediante disciplinas como el Karate, Tai Chi Chuan o Chi Kung, cuidando la dieta y la higiene personal. 3.- Formación académica constante, cursando y aprobando un mínimo de un máster o posgrado por año y 4.- Teletrabajo.
Https://www.amazon.com/author/robertoguillermogomes
https://globalsolidarity.live/mnotes/blog/