¿Quieres recibir una notificación por email cada vez que Cris Sierra escriba una noticia?
Poesía cancionero del alma erguida
Cancionero del alma erguida
Son como brazos, me dijeron.
Allá a lo lejos y tan cerca; me llegaron tus versos.
Agua rebosante de ideas refrescando el alma entera. Fresca, fresca, tu voz anida lo más alto las ideas mías… Te escucho y lloro de llanto agudo en el alma mía.
Tu voz, tu voz otrora extraña, tal vez hoy sea un poco mía. Te escribo y relato cuán gran brecha de vida había. Hoy por hoy tan cerca y tan entendida tu canción anida.
No escucho, por momentos está oscuro mi camino, pero sueño…sueño silenciosamente un lindo recorrido, azul cielo, azul marino, montañas, valles, montes, serranías, todo manchado de verde alegría. Es mi sueño, el de todos los días.
De cuantas veces yo desciendo, para luego levantarme erguida, son descansos. No llores, siempre hay una voz amiga. Isabel Allende hoy levanta el día, y habita en esta casa mía…
Quizás Dios oiga mi voz amiga. Quizás Dios cuente mi gran travesía, por valles, por montes de una mano amiga.
Cielo de oro y plata, de carmín, de cenizas. De canto y de llanto también algún día. Pero sobre todo te cuento alma mía de este sueño hermoso que me lleva el día. Hacia dónde?... hacia el alma amiga.
De cuantas veces yo desciendo, para luego levantarme erguida, son descansos. No llores, siempre hay una voz amiga.
Isabel Allende hoy levanta el día, y habita en esta casa mía…
No llores, no vale la pena llorar si en tu vida sólo tu corazón conquista la dicha de ver florecer la vida…
Dedicado a Isabel Allende.