Dentro de la comunidad autónoma de Cataluña, la ciudad de Girona es una de las que menos presta la atención a los viajeros que viajan a Cataluña, y no supone un gran destino turístico respecto a otras ciudades como Tarragona, que destaca con su visitado parque turístico de Port Aventura, y sobre todo el de la ciudad de Barcelona, gran punto de destino nacional e internacional de España. Esto hace que la ciudad de Girona pese a sus grandes reclamos y oferta cultural quede muchas veces en un segundo plano respecto a otras ciudades.

Uno de los reclamos que facilita el viaje a la ciudad es su sobresaliente comunicación con grandes poblaciones a través de infraestructuras como el Tren Madrid Girona, que permite conectar ciudades tan importantes como Barcelona o Madrid a través del ferrocarril de alta velocidad, ofreciendo en la ruta del tren AVE a Girona, desplazamientos rápidos, cómodos y al centro de las ciudades.

Desde el punto de vista histórico la ciudad de Girona, tiene un gran legado gracias a las distintas culturas que han ido pasando por la ciudad, habiendo pasado por ella culturas como la Íbera, la musulmana y la católica, dejando en cada época un rico patrimonio que se conserva en la actualidad para disfrute de las personas que la visitan cada año. Dentro de su patrimonio destacan edificios como la Catedral de Gerona, la Antigua Judería, los Baños Árabes, el Antiguo Hospital de Santa Catalina o el Monasterio de San Pedro de Galligans. Todos estos edificios permiten conocer más de cerca el rico pasado de la ciudad, además de poder disfrutar de su arquitectura perfectamente conservada.

Pero la ciudad destaca, sobre todo, por la serenidad y equilibrio de su arquitectura. De este paisajismo los visitantes lo pueden disfrutar en sus vistas sobre el río Oñar, en las que destacan sus casas colgadas o en su casco histórico o Barri Vell, en las que los visitantes pueden pasear de forma agradable mientras visitan por el llamado Paseo de la Muralla rodeados de algunos de los principales atractivos de la ciudad.

Además, para completar la visita a la ciudad es necesario no dejar la oportunidad de disfrutar de su gastronomía que es parte de la cultura de Girona. Entre sus platos y preparaciones más famosas destacan el mítico Fuet, butifarra o salchichón Gerundense o carnes como el bou estofat. Dentro de las preparaciones dulces destacan los Taps, los carquinyols de Olot, las Teules de Santa Coloma de Farnés y sus famosos los xuxos.