Esta conducta se evidencia en la compra indiscriminada de medicinas para la gripe, mascarillas, guantes, entre otros implementos para prevenir un posible contagio.

La posible llegada de la gripe porcina a nuestro país ha generado que la población presente signos de ansiedad, tensión e inseguridad, evidenciada en la compra indiscriminada de medicamentos para la gripe, mascarillas, guantes o en el rechazo a consumir carne de cerdo, afirmó el director del Instituto Guestalt de Lima, Manuel Saravia.

"Desde la perspectiva de la salud mental, una epidemia de gran magnitud como la gripe porcina implica una perturbación psicosocial que puede exceder la capacidad de manejo de la población afectada. La población sufrirá tensiones y angustias en mayor o menor medida", dijo el especialista.

Advirtió que especialistas estiman el incremento de la incidencia de trastornos psíquicos por informaciones o casos de dicho mal. "Entre una tercera parte y la mitad de la población presentará alguna manifestación psicopatológica, de acuerdo a la magnitud del evento y el grado de vulnerabilidad", agregó.

Saravia Oliver consideró que los efectos en la salud mental serán más marcados en las poblaciones que viven en condiciones precarias, poseen escasos recursos y tienen limitado acceso a los servicios sociales y de salud.