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A continuación les dejo un artículo mío antiguo que refleja la poca tolerancia que tienen muchos tuiteros, en especial los social confusos, hueveras y los caviares, es esta ocasión graficada en la periodista Rosa María Palacios.
Autor: Felipe Zapata (@Felipe_zp)
Era Viernes y por tradición tuitera, se conmemoraba el día de los #FF, aunque este Viernes era diferente: se recordaban los 12 años de la difusión del primer vladivideo, hecho que marcó un antes y un después en la historia del fujimorismo al poner al descubierto toda una mafia de corrupción que el entonces asesor presidencial, Vladimiro Montesinos, logro tejer para 'monopolizar' la corrupción en el país.
La celebración es obviamente de todos peruanos, pero como siempre, las hueveras y sus padres, los caviares, se apropiaron de ésta desde temprano (ya sabemos que les encanta hacerse de causas "políticamente correctas"), y empezaron a despotricar contra el fujimorismo de arriba para abajo.
Todo iba a salir de boca para ellos, hasta que ocurrió algo inusual. Keiko Fujimori, la lideresa del nuevo partido "Fuerza Popular" y lideresa también de la oposición, entro al twitter. Como era viernes, hizo lo que la gran mayoría de tuiteros (si no es todos) hacen aquel día: enviar recomendaciones o menciones, sugiriendo a nuevos "tuiteros" seguir o leer a una determinada persona. Lo que en el argot tuitero se les llama los "FollowFriday" o abreviados #FF. No pasaron poco minutos para que ocurra algo de antología: las hueveras y demás busca puestos (el grupito "No a Keiko" o "NAK"), uniéndose a los tuiteros pagados por las caviarada se encargaron puntualmente de insultar y tratar de desprestigiar a Keiko Fujimori, todos estos salieron prestos de sus madrigueras y tal cual, multiplicándose como ratas encima de la presa, empezaron a devorar en insultos, ofensas racistas y demás a la ex candidata presidencial. Lamentable espectáculo de doble moral ofrecido por estos "políticamente correctos" que arengan la defensa de la mujer, sin embargo, no escatimaron insultos ni groserías para con una a la que odian por sus ideales. Pero eso no fue todo, los tuiteros que fueron mencionados por Keiko Fujimori, fueron automáticamente puestos en la mira, y todos los "convidados" de estos #FF, recibieron toda clase de insultos.
Todos fueron celebrados bajo la atenta mirada de la conocida periodista Rosa María Palacios, que sin pestañear, se unió a la triste fila de insultos contra estas personas; que las calificaba desde FUJITROLLS, a soldados de la mafia, delincuentes virtuales, etc. Incluso, algunos habríamos sido tuiteros pagados (algo que estos Hueveras conocerían muy bien por causa, sino preguntemos ahi en su lugar de "trabajo" ubicado en Av. De la Aviación 326 - Miraflores ) . Incluso en su locura del día la periodista disque seria, y tolerante llegó a decir que que se le había ofendido con insultos cosa que nunca puedo ni podrá probar puesto que jamás se le ha insultado e incluso muchos de los recomendados afirmaron ni siquiera seguirla. Acá 3 tuits que RMP soltó sobre el tema:
Cabe resaltar que mayoría de los tuiteros que recibieron las menciones, se mostraron sorprendidos por el "respaldo" puesto que mayoría no eran fujimoristas en lo absoluto. Aún así, la cortesía demandaba un agradecimiento, y eso hicieron muchos. Pero asi como la ex-asesora fujimorista atacó a los recomendados por Keiko, muchos tuiteros no se hicieron esperar y mandaron respuestas contundentes desmintiendo cualquier falsedad esta haya dicho.
Miklos, con la cuenta @mlukacs, quien si es fujimorista autodenominado, ante la lista de insultos a todos, decidió hacerle frente a una Rosa María Palacios que parece, ayer en la noche no tenía nada más que hacer que insultar a gente decente, a ciudadanos de a pie con derecho a expresarse y dar opiniones (le gusten o no) en las redes y en este caso. el Twitter.
La señora periodista, utilizó un calificativo que suena hasta
difamante "fujitroll" al cual Miklos reaccionó con una serie de tuits y de
pregunta a los afectados como la siguiente:
Las respuestas de la gente entre sorprendida y molesta no se hizo esperar. El insulto había provenido de quien se dice ser una periodista honesta. La honestidad no permite jamás que alguien calumnie a otro por meros "consejos" de externos c hupamedias hueveras. El comportamiento de Rosa María Palacios hacía tantos ciudadanos de a pie, sin la ventaja de una pantalla o de su popularidad mediática como ella si la tiene, la pintó de cuerpo entero.
CONCLUSIONES