Cuando una persona bebe , y se emborracha , se encanta consigo misma, y da por sentado que los demás participan de aquella adoración por su persona .

Unos cuantos tragos bastan para que repentinamente cualquier idiota se sienta un talentoso, profundo, genial y conquistador. En pocos instantes se ha transformado en un maravilloso narrador de historias, ha adquirido una voz digna de la ópera, ha descubierto como se baila la salsa y ha conquistado esplendor y estatura excepcionales.

El que era solo un enano se ha convertido en un verdadero gigante, pero la verdad es que era mejor cuando era un enano.

Desde hace mucho, muchas personas se han visto obligadas a contemplar con ojos cuerdos las gracias alcohólicas de los compañeros, y no se encuentran tan divertidas como ellos pretenden que lo son.

Los borrachos adquieren sobrehumana potencia de visión y oído. Son capaces de descubrir a una víctima potencial en el otro extremo de una sala oscura. Nunca hay que dejarse arrinconar por un borracho , lo traspasará con su mirada y no lo va a dejar escapar hasta que le haya confesado todas sus faltas. Después evitará cruzarse en su camino, por lo menos por un mes, por vergüenza y remordimiento.

Es imposible sostener una conversación con un borracho . Las palabras mas comunes cobran para el significados misteriosos e inescrutables, y las ideas mas simples se hacen tan esquivas que no aciertan a comunicarlas aun cuando pase toda la noche intentando hacerlo.

Atando cabos adivina la persona que el borracho está enfática aunque incoherentemente a favor de alguna cosa, pero no hay que darle la razón, ya que puede enfadarse, porque se queda sin pretexto para seguir alegando.

Es imposible sostener una conversación con un borracho

Para los bebedores el tiempo no existe. De todas las variedades del alcoholismo en masa, la mas penosa para el participante que se mantenga siquiera parcialmente en su juicio es el cóctel .

Nada puede dar mas triste idea del progreso humano que comprobar como, después de muchos siglos de esfuerzo, la humanidad no ha logrado inventar mejor forma de divertirse en común que los horrendos cócteles , grandes y pequeños, donde todos los asistentes, parados sobre los adoloridos arcos de los pies, se esfuerzan por extraer del vacío de su interés recíproco conversaciones insustanciales. Parece la mas infantil de las diversiones.

Lo único que podría empeorar el cóctel sería que los anfitriones proporcionasen un altavoz a cada invitado. Porque el achispado habla cada vez mas y mas alto. Esto es consecuencia natural del rápido aumento de su propia importancia.

Mi observación, dicen, es mucho mas aguda que la de usted y me incita a gritar para ahogar la suya. Esta pugna conduce a la mas intrincada serie de interrupciones. Rara vez se le permite a nadie finalizar una frase. Hay interrupciones de interrupciones de interrupciones.

No se debe omitir la mención de los bebedores que se manifiestan mezquinos, malhumorados, groseros o francos en vez de exageradamente amables.

Muchas personas están cansadas de los vuelos de fantasía de los alcohólicos , de las metáforas al ron y de los entusiastas hijos del vino. Los individuos que son tontos cuando están en sus cabales, son todavía mas tontos cuando están bebidos , la única diferencia es que manifiestan su tontería con mayor audacia.

Cuando una persona bebe, y se emborracha, se encanta consigo misma

Decididamente, a muchos no les gustan los borrachos , pero a ningún borracho le importa un comino, el se gusta a sí mismo por todos.