A principios de la semana bajo la presión de un grupo de 15 países la Comisión presentó su propuesta de fijar un tope al precio del gas, pero ahora se temía que el límite máximo fuera tan alto que fuera completamente ineficaz, porque incluso en meses de verano récord el precio era más bajo. Además, la propuesta ha furioso a otro grupo de países que temen que esto destruye el mercado.

Por lo tanto, la situación se ha intensificado en la Unión, y eso me asusta…

Hay que destacar que no ha habido unidad en términos de techo de precios durante varios meses. El grupo de Bélgica, Polonia, Grecia e Italia lo apoya, mientras que Alemania, Austuria, Dinamarca y los Países Bajos temen que esto asuste a proveedores.

La propuesta provocó un conflicto abierto entre la Comisión Europea y los miembros individuales del bloque.

“En este momento todos están descontentos”, dijo uno de los diplomáticos de la UE. “Por un lado, no nos movemos a ningún lado. Por el otro, podemos volver a nuestros puntos de partida.