¿Quieres recibir una notificación por email cada vez que Luis Plasencia escriba una noticia?
Una vida dedicada a Dios y su obra " Opus Dei ", baluarte del catolicismo en el mundo
La Iglesia Católica celebra la fiesta de san Josemaría Escrivá de Balaguer, fundador del Opus Dei, el 26 de junio. Recogemos los datos de algunas de las Misas que con este motivo se celebrarán en el Perú.
LIMA
Basílica Catedral de Lima, 7:30 p.m.
PIURA
Ermita de la Universidad de Piura, 6:30 p.m.
CHICLAYO
Iglesia Catedral, 8:00 p.m.
TRUJILLO
Colegio Claretiano, 7:30 p.m.
CAÑETE
Santuario Madre del Amor Hermoso, 7:00 p.m.
CAMANÁ
Iglesia Catedral, 7:00 p.m.
CUSCO
Iglesia Catedral, 7:00 p.m.
ABANCAY
Iglesia Catedral, 7:30 p.m.
AYACUCHO
Iglesia Catedral, 7:00 p.m.
HUANCAVELICA
Iglesia Catedral, 6:00 p.m.
JULI
Iglesia Catedral, 4:00 p.m.
AREQUIPA
Iglesia Catedral, 27 de junio, 5:30 p.m.
Josemaría Escrivá de Balaguer nació en Barbastro (Huesca, España) el 9 de enero de 1902. Sus padres se llamaban José y Dolores. Tuvo cinco hermanos: Carmen (1899-1957), Santiago (1919-1994) y otras tres hermanas menores que él, que murieron cuando eran niñas. El matrimonio Escrivá dio a sus hijos una profunda educación cristiana.
El Opus Dei fue fundado en Madrid, España, el 2 de octubre de 1928 por san Josemaría Escrivá de Balaguer
El Opus Dei fue fundado en Madrid, España, el 2 de octubre de 1928 por san Josemaría Escrivá de Balaguer. En 1982, el Papa Juan Pablo II lo erigió en prelatura personal de ámbito internacional mediante la Constitución Apostólica Ut sit. Su nombre completo es Prelatura de la Santa Cruz y Opus Dei.
Fallece en Roma el 26 de junio de 1975. Varios miles de personas, entre ellas numerosos obispos de distintos países —en conjunto, un tercio del episcopado mundial—, solicitan a la Santa Sede la apertura de su causa de canonización.
El 17 de mayo de 1992, Juan Pablo II beatifica a Josemaría Escrivá de Balaguer. Lo proclama santo diez años después, el 6 de octubre de 2002, en la plaza de San Pedro, en Roma, ante una gran multitud. «Siguiendo sus huellas», dijo en esa ocasión el Papa en su homilía, «difundid en la sociedad, sin distinción de raza, clase, cultura o edad, la conciencia de que todos estamos llamados a la santidad».