¿Tu PC no va bien? Que no cunda el pánico, Hay muchos problemas que puedes arreglar. Te exponemos los problemas frecuentes con tu PC y cómo resolverlos.

De repente y sin esperarlo, vas a ponerte a trabajar, a andar por Internet o a llevar a cabo otra labor con tu ordenador y saltan todas las alarmas: ¡mi PC no funciona! Si tu PC no va bien, se inhabilita, se reinicia, muestra fallos o tiene un comportamiento raro, puede deberse a diferentes causas.

Pero que no cunda el pánico: lo primero que tienes que llevar a cabo si tu PC tiene errores es ubicar qué los está ocasionando para ponerle remedio. En la mayoría de los casos, no se necesita ser un profesional en equipos informáticos para detectar qué es lo que está interfiriendo  tu PC. En este texto te contamos cuáles son los inconvenientes más recurrentes con tu PC y cómo resolverlos para que consigas repararlos tú mismo. Así que paso a paso te explicamos qué hay qué hacer para hallar la raíz del asunto. Aquí tienes las tres causas más frecuentes.

3. Mi ordenador se inicia muy lento

Uno de los inconvenientes frecuentes con nuestro PC es que arranque muy retardado o que tenga algún problema para comenzar la sesión. Esto puede deberse a que un programa está interfiriendo en el buen desempeño de Windows, por eso lo puedes llevar a cabo es inhabilitar los programas en el arranque para ver si son los causantes. Para eso, sigue los pasos que te indicamos a continuación: Accede al Gestor de tareas usando el buscador o Cortana. Dirígete a la pestaña Inicio para ver las apps que se inician cuando comienza Windows 10. Busca los programas que tengan valores Prominente o Medio en la columna Impactode inicio, puesto que son los que tienen la posibilidad de estar ralentizando el desarrollo de arranque. Desactívalos presionando el enlace derecho sobre la palabra Habilitado de la columna Estado.  

2. Mi PC se reinicia, muestra un display de error o no arranca

Si has instalado un programa, un controlador o un gadget nuevo y en este momento tu PC no funciona correctamente, lo más seguro es que un programa esté bloqueando el inicio de Windows, o que dos periféricos hayan entrado en conflicto. Suponiendo que haya aparecido la pantalla azul de  Windows, aquí te contamos todo lo que puedes llevar a cabo para arreglar el inconveniente.

Si lo que pasa es que tu PC se reinicia, puedes llevar a cabo lo siguiente para solucionar el problema: En primer lugar, ingresa desde otro PC a la página de descarga de programa Microsoft para bajar una imagen de disco de Windows 10 en una memoria USB o en un DVD.

A continuación, introduce el USB o el DVD en el PC averiado y reinícialo. Aparecerá la pantalla de instalación de Windows, donde tendrás la posibilidad de elegir la alternativa Recomponer Windows. Suponiendo que no te salga esta alternativa es posible que el PC no está configurado para arracar desde una unidad.

Para cambiar el orden de arranque e la BIOS deberás continuar cómo desarrollador. Ahora, clica en la alternativa Arreglar inconvenientes y después selecciona Configuraciones destacadas > Configuración de inicio > Reiniciar. Cuando el PC se reinicie, presiona las teclas 5 o F5 para reiniciar el PC en Modo seguro con funcionalidades de red. Luego, dirígete al Gestor de dispositivos su nombre en el campo de búsqueda de la barra de tareas y despliega los Adaptadores de pantalla. Suponiendo que aparezcan dos, deshabilita uno de ellos, y si solo hay uno haz clic sobre él con el enlace derecho del ratón, selecciona Caracteristicas y después Revertir al controlador previo. Reinicia cuando finalizes para aplicar los cambios.

1. Mi PC no se enciende Uno de los peores sustos que nos tenemos la posibilidad de llevar es que nuestro PC no inicie. Puede deberse a muchos factores, algunos más graves que otros. Asegúrate de que hay corriente eléctrica. A veces puede suceder que la luz se haya ido sin que te des cuenta. Si es un portátil, comprueba la batería. La batería de tu portátil puede jugarte una mala pasada. Si se puede extraer, sácala y vuelve a colocarla en su lugar por si hubiera algún inconveniente, y luego conecta el cargador. Asegúrate de que has encendido el PC. Hay veces que el inconveniente es porque no hemos encendido como corresponde el PC.  Comprueba el monitor. Si tu ordenador sigue sin responder, otra de las cosas que puedes llevar a cabo es corroborar que el monitor está bien conectado, debido a que es viable que el PC haya arrancado pero que no se muestre nada por algún problema en la pantalla. Fíjate que los cables están bien conectados y de que el monitor tiene brillo suficiente. Si con estos pasos tu PC no inicia, el inconveniente puede ser de la fuente de alimentación, de la placa o de otro ingrediente. 

En este caso, quizá sea factible llevarlo algún servicio de soporte técnico.