Hoy estamos en la noche "más siniestra" del año, de orígenes celtas, y apadrinada en el país Norteamericano. La noche de Halloween es donde los críos lo pasan de muerte, o digamos una noche terrorificamente terrorificamente divertida. Los directores de cine sacan a la luz sus últimas obras siniestras, donde hay que decirlo bien claro en muchas de sus ocasiones son más cómicas que otra cosa. No se, me imagino que uno de esos monstruos que han creado intente matarme y lo que haga es que me de un infarto de la risa antes de que hayan llegado hacia mi para hacerme algo. Pero bueno, esta noche y como es fin de semana los bares y discotecas haran un plan para así aprovechar todos estos días...Consumismo amigos, consumismo...

Ya sea Viernes 13, Halloween, Noiche terrorifica, y en último caso Scream (para mi lo mejor que ha podido hacer Wes Craven), pero hubo una película que paso sin pena ni gloria y que promoción no la falto para nada. Esta es, "El diablo metió la mano".

Rodman Flender dirigio una comedia terrorificamente divertida. Anton es un joven estudiante, un crío que le gusta mucho las juergas y fumar Maria, pero que al mismo tiempo guarda un terrible secreto. Un ente maligno se apodero de su mano derecha, la cual va por libre sin hacerle ningún caso, y asesinando a toda la gente que le rodea. Pero todo esto tendra su sacrificio, dos amigos que asesino aparecerán, pero ¿para que?.

El film es de lo más fácil de ver, si te gusta tener algún susto gracioso seguro que os gusta... Aquí os la dejo...Disfrutarla...

Ver película.