El presidente de Guatemala, Jimmy Morales, juramentó este martes a la activista social y víctima de la guerra civil (1960-1996) Lucrecia Hernández Mack como nueva ministra de Salud, en sustitución de Alfonso Cabrera.

"Hemos nombrado para que a partir de mañana (miércoles) la doctora Lucrecia Hernández Mack sea la nueva ministra de Salud Pública y Asistencia Social", dijo Morales en un acto especial en el Palacio de la Cultura de la capital.

Junto con Hernández, fueron nombrados otros cuatro altos cargos como parte de la reestructuración organizativa de ese ministerio, aclaró el gobernante.

El exministro Cabrera renunció al cargo el pasado 19 de julio, casi siete meses después de asumir, en medio de una crisis en el sistema sanitario por falta de insumos y medicinas para pacientes, así como bloqueos de carreteras y protestas en la capital por sindicalistas.

Morales asumió su mandato el pasado 14 de enero para un periodo de cuatro años. En estos seis meses sufrió además la renuncia de otros dos ministros de su gobierno, compuesto por 14 ministerios.

Hernández, de 42 años, es hija de la antropóloga Mirna Mack, quien fue brutalmente asesinada de 27 puñaladas el 11 de septiembre de 1990 por miembros del desaparecido Estado Mayor Presidencial, un ente del ejército encargado de dar protección a los presidentes de turno.

La antropóloga fue asesinada en el centro histórico de la capital, cuatro días después de presentar un informe sobre el desplazamiento de miles de indígenas, a causa de la represión militar durante la guerra civil (1960-1996).

En 1993, el especialista del ejército Noel de Jesús Bateta fue condenado como autor material del asesinato.

Debido a ese pasado violento, Hernández se considera "una mujer guatemalteca profundamente marcada por la historia del país y la de mi familia, soy de izquierda".

No obstante, el gobierno de Morales es de derecha y está influenciado por militares retirados, quienes financiaron la campaña electoral de 2015 que lo llevó al poder.

"Es un desafío enorme asumir una cartera como la de Salud, que es compleja y complicada, que hereda una serie de problemas históricos y coyunturales", reconoció la nueva ministra tras ser juramentada.