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Antes de que abandone el Real Madrid, con toda seguridad rumbo al Milan, el rendimiento de Kaká durante las cuatro temporadas íntegras que ha sido jugador blanco ha demostrado que ha sido una mala operación económica. No obstante, Florentino Pérez dijo hace unas semanas que el fichaje del centrocampista brasileño, pese a su pobres números en el terreno deportivo, sí fue un éxito en el ámbito económico, ya que según el presidente esa inversión ya estaba amortizada.
Elaborando un cálculo aproximado sumando el coste del fichaje de Kaká (65 millones) y la ficha de diez millones de euros por cada una de las cuatro temporadas que ha estado en el Real Madrid, queda demostrado que cada gol, cada partido e incluso cada partido jugado ha costado demasiado dinero a las arcas blancas.
Al dividir esa cifra aproximada de 105 millones que comprende su traspaso y los cuatro años de salario , por los partidos oficiales jugados (120) y las asistencias de gol (29) junto a los goles marcados (32) en todos estos encuentros, las cifras son las siguientes: