Cuando nos proponemos bajar de peso en una semana, debemos tener en cuenta  antes que nada, que lo más saludable es hacerlo de una manera más pausada, modificando la dieta y haciendo ejercicio.

Por qué es indispensable bajar de peso

Si bien es cierto que el mundo moderno casi que “obliga” a las personas (a las mujeres, primordialmente) a ostentar una figura esbelta como símbolo de aceptación social, también es cierto que el factor verdaderamente importante a tener en cuenta, ES LA SALUD.

El vértigo con el que se desarrolla la vida actual, obliga a muchas personas a alimentarse con la denominada “comida chatarra”, que es bastante rica en grasas, calorías, carbohidratos y demás.

Las comodidades de nuestro tiempo, también han influido drásticamente para que las personas lleven un estilo de vida sedentario. Además, pareciera “que no hay tiempo para hacer ejercicio, con tantas ocupaciones”.

En lo que respecta a las consecuencias que se pueden presentar con los kilos de más,   tenemos que las personas con sobrepeso (y las obesas, con mayor razón aún) son las más propensas a sufrir de algunas patologías sistémicas.

La diabetes, la hipertensión arterial, los problemas cardiovasculares y los  cerebrovasculares, son las más comunes.

Existen varias dietas que nos permiten bajar de peso rápidamente. No obstante, es necesario tomar precauciones y no “echar mano” de la primera propuesta que se nos presente.

Veamos ahora algunas dietas de efectos rápidos y que NO representan peligros para la salud.

Si restringimos drásticamente los carbohidratos en el desayuno solamente, no sólo lograremos perder peso de manera rápida sino que, lo que es más importante aún, no estaremos atentando contra la salud.

Se trata de suprimirlos totalmente durante los primeros tres días (sólo en el desayuno, insistimos). Existen muchas personas que padecen de algo que algunos especialistas han denominado “cerebro de gordo”.

Cuando se tiene esta característica, suele ser un tanto difícil suprimirlos totalmente.  En este  caso, existe una solución. Comerlas en menores cantidades de lo habitual, pero que sean integrales.

Después de los tres días, se debe seguir bajando la cantidad,   hasta que el cerebro genere  un cambio de patrones que aceleran el metabolismo.

Algo bien trascendental a tener en cuenta, consiste en que se trata de llevar esta dieta sólo por una semana (nada más), al cabo de la cual es necesario adoptar una dieta equilibrada, combinada con ejercicio periódico.

Ahora, el “milagroso” té verde es antioxidante y tiene la maravillosa capacidad de quemar la grasa preexistente en los depósitos corporales.

Además, es de lo más recomendable para promover el proceso digestivo y, de paso,   acelerar el metabolismo.

Se trata de tomar el té verde (sin azúcar, por supuesto) durante una semana, una hora después del desayuno y del  almuerzo. Se puede tomar, además, en el momento en que se desee.

Esta dieta se debe complementar con la ingesta de alimentos que queman grasa (durante esa semana), tales como la piña, las almendras, el yogur griego, los cítricos y demás. Jamás debemos olvidar los ocho vasos de agua al día.

Otra dieta bastante efectiva para  bajar de peso en una semana, es la dieta de la piña.

Se trata de sólo comer este alimento durante los tres primeros días de la dieta (en lugar del desayuno), al cabo de los cuales se seguirá comiendo en el desayuno mismo y en el almuerzo.

Se le debe combinar con otros alimentos saludables y no se debe utilizar en las noches.

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