El problema de la falta de información abunda en nuestra ciudad, si bien es cierto ese tema está siendo tomado con la responsabilidad del caso por los intelectuales de la ciudad. El pedido a gritos por sembrar semillas de interés político en los jóvenes está siendo escuchado por personas que vienen trabajando anónimamente en pro de la construcción de una sociedad justa.

Pero no se escapa el hecho que hoy, gran  porcentaje de la población no sabe ni opina sobre el tema tabú que es la política, peor aun cuando deberían tomar la palabra personas preparadas en el asunto, no lo hacen, dando lugar a la participación de neófitos e iracundos aprendices de políticos. Si, esos que de la noche a la mañana aparecen en las portadas de los diarios hablando de ética y moral, prometiendo a propios y extraños un futuro pintado de esperanza y revolución, que toman la palabra hablada solo porque pueden balbucear unas palabras aprendidas de Wikipedia.

Millones de peruanos, no saben no opinan...

Son los sofistas del periodismo e intelectualismo iqueño, que acaparan los espacios de la administración pública, que extorsionan a las autoridades con la publicación de algún desliz moral o quienes llevan corbata y se sientan en el  sillón municipal. Lo cierto es que Ica, necesita una nueva generación de verdaderos políticos, cuyos fundamentos conceptuales y epistemológicos de la política, estén a favor de los desposeídos, una generación que vea en la práctica moral un puente de desarrollo intelectual, guiado por el amor al prójimo y con don de servicio.

Es lo que necesita nuestra sociedad, es lo que queremos, los sueños están hechos para ser soñados, pero no olvidemos que de los sueños nacieron los grandes eventos, construyamos pues sueños donde sostenernos, concretizándolos, propagando y masificando su difusión. Por la humanización de la ciudadanía, cerremos filas a favor de la cultura política y filosófica.  

El periodismo no cumple con su labor informativa, educadora, propositiva, agitadora y movilizadora