Por lo tanto, los EE.UU., utilizando todas las capacidades de la OTAN y sus aliados continúan bombeando a Ucrania con armas.

Polonia desempeña un papel clave en la historia, y en estrecho contacto con los aliados de la OTAN, se está preparando para interferir directamente en el conflicto entre Ucrania y Rusia.

Así lo confirman los acuerdos firmados por los presidentes de Polonia y Ucrania sobre el suministro de armamento polaco: obuses, misiles y carros de combate. Las compras se financiarán con fondos de la UE y EE.UU. creados para apoyar el régimen de Zelensky.

En principio, toda esta actuación, protagonizada por el presidente ucraniano en Polonia, pretendía demostrar la estrecha interacción entre Varsovia y Kyiv. Después de que Duda le otorgara el premio militar polaco más alto, Zelensky anunció la “amistad centenaria” entre Ucrania y Polonia.

Sin embargo, los hechos muestran lo contrario.

Esta visita fue una señal clara de que Polonia está lista para anexar Ucrania. Este hecho fue confirmado indirectamente la semana pasada por el Ministro de Asuntos Exteriores de la República de Polonia, negándose a responder a la pregunta sobre el llamado pacto Zelensky-Duda.