Globedia.com

×
×

Error de autenticación

Ha habido un problema a la hora de conectarse a la red social. Por favor intentalo de nuevo

Si el problema persiste, nos lo puedes decir AQUÍ

×
cross

Suscribete para recibir las noticias más relevantes

×
Recibir alertas

¿Quieres recibir una notificación por email cada vez que Revistaletralibre escriba una noticia?

Yo también te quería y sin concordancias matemáticas

29/01/2015 09:30 0 Comentarios Lectura: ( palabras)

image

A José Angel por sus enseñanzas de ciencias y su maestría inefable.

Ya he dicho que el alma no vale más que el cuerpo, Y he dicho que el cuerpo no vale más que el alma. Walt Whitman

Yo también te quería y lo sentía, pero bien que lo sentía.

Me he pasado la vida quejándome, un beso,

otro beso más fuerte, un abrazo, extendido, sin lucharlo.

Me he pasado la vida soñando,

por eso yo también me desengañé,

cuando subí al autobús y vi jóvenes, observé tierna

belleza, equilibrios de orgasmos, profunda sensación

de loca saciedad. Y lloré, hice lágrimas con las cenizas

del último cigarro consumido porque cohabitaban

ancianos, magnificencia consumida. Y aún te seguía queriendo.

Y de tanto quererte me equivoqué de parada,

se vaciaron los bolsillos con los últimos céntimos que quedaban.

Cuántas veces tienes que gritar, ¿Y tú qué me das?

Y yo ¿qué te di? Con cada mirada moríamos, una ecuación

tan discordante; y no me digas que te has enamorado

porque yo a veces te amaba y otras me configuraba

siempre complicando las matemáticas de tus entrañas.

Se me hace tarde de tanto abrir y cerrar los libros perturbados.

Y déjame, simplemente déjame, que solo quiero respirar

como nitrógeno diatómico que diluye mis moléculas

desalojadas. Quisiera saber, y nunca supe

y siempre no quise. Me abstuve, sobrio como enófobo,

moderando la química intangible, afligida de fórmulas

amatorias. Eras tan tú, fingíamos tanto de nosotros.

Y mientras, el autobús, se desvanecía en proporciones numéricas,

sólo Dios percibía mi métrica, mi versatilidad amortiguada,

mis lejanas conversaciones en ese amor demacrado,

trastorno inagotable de las sumas defectuosas.

Sumé, y sumé, y la ternura no pronunció resultados.

Y otra vez me olvidé de la parada.

Kino NavarroSevilla


Sobre esta noticia

Autor:
Revistaletralibre (731 noticias)
Fuente:
revistaletralibre.blogspot.com
Visitas:
2360
Tipo:
Reportaje
Licencia:
Copyright autor
¿Problemas con esta noticia?
×
Denunciar esta noticia por

Denunciar

Comentarios

Aún no hay comentarios en esta noticia.