Tres ancianos descansaban a la orilla del camino, cerca a la casa de un hombre humilde.

La mujer del dueño de la casa abrió la puerta para salir a hacer sus labores cotidiandas encontrándose con los ancianos que la saludaron amablemente.

Uno de los ancianos se puso de pie y dijo:

- Buen día, buena mujer, somos Riqueza, Éxito y Amor, solo estamos descansando aquí sentados cerca a tu casa, esperamos no molestar.

- Pero, de ninguna manera, por el contrario, pasen adelante por favor, me gustaría invitarles algo para calmar vuestra hambre y sed.

- Eres muy amable mujer, pero, la verdad es que no podemos entrar los tres en ningún lugar, puedes invitar a uno de nosotros.

La mujer queda pensativa y finalmente entra a la casa, se produce un diálogo en la familia:

- Invitemos a Riqueza - dice el marido - nos hace tanta falta.

- Mejor invitemos a Éxito - replica la esposa - así nos sentiremos mejor, lograremos nuestras ambiciones y nos realizaremos como personas de esta comunidad.

¿Pero no dijeron que solo podía no podían entrar los tres?

- Yo creo que lo mejor es invitar a Amor - tercia la hija - después de todo, nosotros nos amamos tanto que las carencias o significan nada, siempre nos hemos llevado bien y amándonos como nos amamos entre nosotros no hay dificultad que no superemos, creo que lo mejor es que invitemos a Amor.

Y así, k decidieron invitar a Amor, así que salió la mujer y con amabilidad se dirige a los ancianos:

- En verdad nos gustaría invitar a los tres, pero como solo es permitido a uno de ustedes aceptar la invitación, pues, hemos elegido a Amor, así que aquel de ustedes que lleve ese nombre, tenga la bondad de pasar a comer con nosotros, el presentaré a mi familia. - dirige una mirada los ancianos y se aparta para abrir la puerta.

Amor se pone de pie y camina hacia la entrada. Los otros dos ancianos se ponen de pie y siguen al primero. La mujer, sorprendida pero alegre pregunta:

- ¿Pero no dijeron que solo podía no podían entrar los tres?

- Buena mujer - responde Amor - si hubieras invitado solo a Riqueza o a Éxito solo habría podido ingresar el invitado, pero al invitar a Amor, haz abierto la puerta a los tres pues donde entra el Amor, con él entran el Éxito y la Riqueza.

La verdad es que no podemos entrar los tres en ningún lugar, puedes invitar a uno de nosotros

Amigo lector, ¿a quién quieres invitar a entrar en tu vida?